BENALAURÍA COMPRARÁ ‘TORYMUS’ PARA SUS CASTAÑEROS
El Ayuntamiento de Benalauría destinará 3.500 euros de su presupuesto municipal a la adquisición de 20 dosis de Torymus sinensis que serán entregadas a los productores de castañas del municipio. Estas dosis serán compradas a través de la Cooperativa de Castañas de Valle del Genal, organización autorizada para gestionar el procedimiento, y servirán para complementar a las solicitadas a título personal por los propios castañeros del pueblo.
El Torymus sinensis es el depredador natural y agente de control biológico de la avispilla del castaño, una plaga de origen chino que se detectó por primera vez en el Valle del Genal en 2014 y que en las últimas temporadas ha causado estragos de importancia en la producción de castañas.
Según ha informado Eugenio Márquez, alcalde de Benalauría, se establecerán dos criterios para la distribución de las dosis. Por un lado, se entregará una a cada uno de los vecinos de la localidad que son socios de la cooperativa y que tienen sus explotaciones de castaños en el término municipal, alrededor de una docena de productores. Por otro lado, las dosis restantes serán liberadas por el Ayuntamiento de Benalauría en diferentes zonas de castañar intentando abarcar el máximo terreno posible. En Benalauría se localizan alrededor de 90 hectáreas dedicadas a la producción de castañas. Con todo ello, el Consistorio pone de manifiesto su apoyo al sector, contribuyendo a reducir el gasto que están asumiendo los agricultores en lo que a la adquisición de Torymus se refiere.
A finales de 2019, tras 5 años de plaga, el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente autorizó el uso libre de Torymus por parte de los productores de castañas, siempre que sea adquirido en empresas registradas. Desde 2020 el Ayuntamiento de Benalauría impulsa ayudas todos los años para la compra del insecto depredador de la avispilla. El mantenimiento y conservación en buen estado de salud de las 3.900 hectáreas de castañar que hay en el Valle del Genal es imprescindible para el desarrollo socioeconómico de la comarca, ya que este sector es un pilar fundamental en el valle que fomenta el arraigo de los vecinos en los municipios, contribuyendo así a frenar la despoblación.